Ahora que estamos en pleno verano, las temperaturas pueden aumentar de repente en muchas ocasiones. La cuestión es que, en nuestra sociedad, hay grupos como las personas con movilidad reducida, los niños y aquellas que padecen enfermedades crónicas que deben tomar ciertas precauciones ante una ola de calor para evitar que las altas temperaturas produzcan consecuencias perjudiciales para su salud. Por eso hoy, en nuestra tienda de ortopedia online queremos darte algunos consejos para soportar el calor en PMR. Beber abundantes líquidos, llevar una dieta sana, mantenerse alejado del sol en las horas de más calor y llevar ropa ligera son sólo algunas de las recomendaciones que debes seguir. ¡Descúbrelas!
1. Protégete del calor
Una de las formas más seguras para soportar el calor en PMR es evitar salir a la calle en las horas centrales del día, entre las 12 y las 15 horas. Si tienes que salir, intenta buscar siempre lugares sombreados, usa crema solar para no quemarte y lleva ropa ligera de colores claros, gorra para protegerte la cabeza y gafas de sol. Además, es recomendable no realizar deporte ni ningún tipo de esfuerzo físico en estas horas.
2. Permanece bien hidratado
Beber mucha agua durante el día para estar bien hidratado es esencial para soportar el calor en PMR. Lo ideal es beber como mínimo 2 litros de agua al día. Además es aconsejable que mojes la gorra y humedezcas un poco la ropa cuando vayas a salir a la calle en horas con elevadas temperaturas. Además, debes saber que existen situaciones por calor y/o aparición de calambres que también requieren de cuidados de hidratación. En estos casos, se debe cesar toda actividad que se esté realizando, refrescar el cuerpo y beber líquido.
3. Refréscate
Es aconsejable ducharse un par de veces al día para refrescarse o hacerlo con paños húmedos si estás en la calle. De esta forma no tendrás tanto calor y las posibilidades de que te dé un golpe de calor se reducirán considerablemente. Debes saber que el golpe de calor es un cuadro médico grave que se produce cuando el cuerpo es incapaz de regular la temperatura propia. Los efectos que pueden producirse debido a ello son la insolación, la cefalea, el ahogo, las náuseas, la fatiga, los calambres musculares, la taquicardia y la pérdida de la conciencia.
4. Cierra las persianas y ventanas de la casa
Si no tienes aire acondicionado, pon un ventilador y cierra las persianas y ventanas en las horas del día en el que las temperaturas son más altas para evitar que el calor entre en la casa. En cambio, por la noche, es importante que las abras para que la habitación refresque. Si, aun así, tu casa parece un horno, aprovecha para ir a la playa o a la piscina, o a algún centro refrigerado, como una biblioteca, un centro comercial o un centro de la tercera edad.
5. Lleva una dieta sana
Evita las comidas copiosas y aprovecha para incluir en tu dieta más verduras y frutas que aportan frescura y muchos nutrientes. Eso sí, recuerda mantener los alimentos siempre en frío para evitar que surjan brotes por una mala conservación. No obstante, esto no quiere decir que no puedas darte un capricho de vez en cuando. Los helados en estos meses están más que recomendados, sobre todo si son caseros. ¡Esencial para soportar el calor en PMR!
6. Pide ayuda o información
Si padeces alguna enfermedad que requiere de tratamiento, es recomendable que acudas al médico para que te indique si debes tomar precauciones complementarias. Recuerda que los golpes de calor son el riesgo más grave de una exposición excesiva al sol, pudiendo provocar fiebre, dolor de cabeza, náuseas y confusión. Si fuera necesario, no dudes en pedir ayuda o en llamar al 112. En caso de calores intensos, siempre es mejor estar acompañado y recibir ayuda a diario de los vecinos y familiares o solicitar ayuda a los Servicios Sociales del Ayuntamiento de tu localidad.
